A MI COLEGIO
En sus cincuenta años
(Soneto con estrambote)
Aulas de mis
recuerdos donde un lejano día
comenzara a forjarse
de tu soñar la historia,
aulas donde
naciera coronado de gloria
mi querido colegio Marco Antonio Mejía.
Paz de Río, mi
tierra, la de raza bravía
te vio crecer ufano
con fuerza promisoria,
hoy tienes en tus
libros guardada la memoria
de diez lustros tallados con mágica porfía.
Industrial y Minero con vocación henchida
cimientas el
presente e incubas el futuro,
vas dejando tu herencia
de vívidas alburas
y avanzas incansable por senda florecida
cual insigne viajero, que camina seguro,
en busca de la
fuente de sabias escrituras.
Se erija en las
alturas
obelisco en tu nombre para que puedas ser:
un impoluto templo de ciencia y de saber.
obelisco en tu nombre para que puedas ser:
un impoluto templo de ciencia y de saber.
Bonito homenaje a tu colegio, se nota que fueron muy buenos esos tres años que estudiaste allí.Saludos
ResponderEliminarBonistas letras para recordar ese lugar de estudios y trabajo.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Qué hermosos versos, llenos de recuerdos! En la etapa de la vida en que despertamos al saber, al mundo, a la vida.
EliminarMe traes a mi memoria mis propias vivencias. Los estudios, los exámenes, el grupo de compis y las alegrías de los aprobados, y el esfuerzo para conseguirlos...fue una etapa estupenda y memorable.
Es una entrañable entrada para tí y para muchos de nosotros.
Gracias por traerla. Rafael.
Un abrazo.
Muy lindo homenaje,abrazo.
ResponderEliminarMe encanta tu homenaje con todo ese cariño a tu colegio, que guarda grandes recuerdos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hermoso homenaje, Rafael.
ResponderEliminarHay recuerdos imborrables.
Un abrazo
Sentido homenaje a tu querido colegio, Rafael, un abrazo!
ResponderEliminarEs muy bueno ser agradecido
ResponderEliminary valorar donde se camino las primeras aventuras del saber
eso es importante.
Aunque no hago parte de los egresados guardo muy buenos recuerdos de los tres años cursados en sus aulas: uno en la casa de las monjitas y dos en la sede antigua. Por tanto, siempre será para mí, el colegio más querido y añorado... Nidia, Lucía, Rosaba, Eulalia, Dalila, Cristina, Socorro, Élcida, Fabiola, Rito, Elver, Gustavo y Luis, entre otros, fueros mis compañeros.
ResponderEliminarSe dice, bien nacido es ser bien agradecido, recordar esos momentos y agradecer lo que nos enseñaron.
ResponderEliminarHe estado algo ausente por el nacimiento de mi segundo nieto, pero ya estoy aquí con todos vosotros.
Feliz día Rafael.
Un abrazo.
Felices deben estar quienes fueron tus condiscípulos y tus maestros en esos tiempos, si -como lo espero-tengan acceso a esta bella evocación,Rafael. Aunque en más de un caso, imagino, sea desde el más allá.
ResponderEliminarAsí es Esteban, la hice con mucho cariño y espero la lean... algunos (maestros) desde el más allá, otros de ellos y los condiscípulos aquí en esta tierra.
EliminarAbrazos.
Precioso homenaje Rafael. Un trabajo fantástico en alejandrinos (creo).
ResponderEliminarMis felicitaciones por tu genial pluma.
Un abrazo.
Un homenaje entrañable que te califica muy favorablemente.
ResponderEliminarUn precioso homenaje a ese colegio que nos ayudó a ser mejores y a forjar al adulto que hoyo somos.
ResponderEliminarAmor y agradecimiento es lo que veo en tu poema.
Besos
Un placer visitarte Rafael despues de mucho mucho tiempo y encontrarme con ese homenaje al colegio, es una alegria para mi. Siempre he dado mucho valor a esos seres que nos ayuaron a formarnos (los maestros). Un abrazo desde Alemania.
ResponderEliminarEs un homenaje muy lindo. Entrañables recuerdos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hermoso homenaje a ese colegio donde te formaste Rafael, son unos bonitos recuerdos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Recuerdos que se atesoran con el tiempo
ResponderEliminarBuenisimo homenaje Rafael
Cariños
El sentirse agradecido es de justicia. Hoy en día una parte de los egresados, no toman más que como una obligación el cursar. La pasión y el buen hacer siempre dan los mejores frutos. Saludos.
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