viernes, 23 de junio de 2017

SANTUARIOS DE LA VIDA





Los páramos colombianos son ecosistemas únicos en nuestro planeta, refugio de especies endémicas y fábricas naturales de agua. Diversos fenómenos, tales como el turismo irresponsable, la ganadería, la agricultura, la minería y los cambios climáticos, están afectándolos gravemente, poniéndolos en peligro de desaparecer. Es apremiante, antes de que sea demasiado tarde, conocer sobre los páramos para poder valorar la importancia de estos lugares y entender su fragilidad ante manos depredadoras.


AGUAS BENDITAS
(Cuartetos)

Aguas de nuestros páramos... nacidas
arriba en lo más alto de los montes;
allá en donde se alcanzan horizontes
y de musgos, alfombras hay mullidas.

Allá, la madre tierra da sus frutos
en tanto que florece la pradera,
la vida reverdece por doquiera
y son los manantiales impolutos.

Aguas de nuestros páramos... nacidas
arriba junto a grandes frailejones;
allá en donde turpiales y gorriones
cantan sobre las flores encendidas.

Allá, la humanidad tiene guardada
la fuente de la vida, cual tesoro,
impera la cuidemos más que al oro
pues al faltar ya no seremos nada.

Aguas de nuestros páramos... nacidas
arriba entre cascadas de diamantes;
allá en donde hay lagunas fulgurantes
por arbustos y rocas protegidas.

Allá, es grave delito el atrevernos
a dañar al ser vivo o al inerte:
so pena de tener que someternos
 a pagar la osadía, con la muerte.

Agua de nuestros páramos... la suerte,
de tenerla y por ella sostenernos.

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Derechos Reservados Copyright © 2017
Rafael Humberto Lizarazo G.

Monguí, Boyacá..


viernes, 16 de junio de 2017

UN RECUERDO Y UN ANHELO...





"El Rafaelito", le decía mi madre a su nieto consentido: fue su primer nieto varón y ella le profesaba un cariño especial al primogénito de su hijo mayor. El muchacho creció y se hizo hombre, ella enfermó y poco a poco se fue yendo de este mundo hasta que nos dejó para siempre llevándose la ternura que nos deparaba su dulce compañía. Desde aquel día, el protagonista del cuento ha cambiado lentamente su manera de ser, ha ido perdiendo esa bonita alegría que le caracterizaba y se ha vuelto algo huraño, no es el mismo de antes... tal vez le haga falta, más de lo imaginable, su querida abuelita Elvira.


EL RAFAELITO
(Octavillas)

Quisiera otra vez tener
el hijo que tuve ayer,
el que como buen amigo
despertaba mi alegría
y madrugaba conmigo
  a correr en bicicleta…
ese muchacho que un día
hizo mi vida completa.

El joven pulcro y decente,
soñador e inteligente
que fue modelo a seguir:
amable, bien educado
y dispuesto a sonreír
  con absoluta franqueza…
el muchacho bien plantado
de los pies a la cabeza.

Sé bien que no está perdido,
pero se halla refundido
entre las cosas, mundanas,
que le causan embeleso
y se olvida por semanas
  de venir a saludarme…
con los abrazos y el beso
que solía regalarme.

Por tanto amor que profeso
   no dejo de ilusionarme…
por eso, sólo por eso.

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Derechos Reservados Copyright © 2017
Rafael Humberto Lizarazo G.




sábado, 10 de junio de 2017

LLUVIA DE CALAMIDADES





La temporada invernal está en pleno furor: no solamente por las fuertes lluvias de los últimos días, sino por la tormenta de calamidades que agobian al país debido a la indiferencia del gobierno central. Los profesores en paro, al igual que una buena parte de los empleados estatales; las diferentes regiones de nuestra geografía recurriendo a paros cívicos para reclamar la atención del estado y, para colmo de males, los políticos de siempre preparando sus nefastas campañas. La paz no se firma como un premio a los terroristas, la verdadera paz se logra con justicia social para el pueblo sufrido y trabajador.


MIRADAS
(Coplas)

Muy chusca se ve la dama
bajo su paraguas rojo,
la miro por la ventana 
porque si salgo me mojo.

Con su pasito de garza
sobre el adoquín mojado,
cruza elegante la plaza
luciendo bolso rosado.

Las lluvias no solamente
son agua que cae del cielo,
también lo son de injusticias
de penas y desconsuelo.

Los profesores en paro
y el gobierno indiferente,
negándoles el derecho
de sueldo justo y decente

Las provincias olvidadas
por el gobierno central,
no vislumbran esperanzas
que remedien tanto mal.

¿Las escuelas y hospitales
dónde están que no los veo?
¿Los acueductos potables
la salud y el buen empleo?

Sobre el suelo colombiano
llueven males inclementes,
por la culpa de un gobierno
de corruptos indolentes.

Sin equidad ni justicia
  la paz será una utopía...
la paz no es una palabra
es el pan de cada día.

¡Qué situación tan macabra,
pobre de la patria mía!

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Derechos Reservados Copyright © 2017
Rafael Humberto Lizarazo G.

Fotografía superior:
Boyacá SieteDías.


martes, 6 de junio de 2017

EL PRIMER AÑITO...





Las cosas son como son: cuando por primera vez tuve a Martina en mis brazos vibré de emoción, vi en ella a Paola Rosa (nuestra hija menor y madre de la recién nacida). El tiempo se regresó veintiún años atrás y la emoción me arrancó una que otra lágrima de alegría... qué le vamos a hacer, soy un viejo sentimental, la neitecita chiquita me tiene embrujado, la felicidad es inmensa y, así la vida, se pinta de color rosa. De esto hace hoy 365 días, Martina está cumpliendo su primer añito en este mundo.


MARTINA
(Soneto con estrambote)

Sentí vibrar el alma, y en un instante hermoso
cambiaste dulce niña la ruta de mi vida;
eres para el destino cual lámpara encendida
que da lumbre a un sendero a veces nebuloso.

El corazón palpita, y en su latido airoso
anuncia la esperanza que entre mi pecho anida;
yo nací nuevamente, princesa consentida,
el día en que tú naciste mi ángel candoroso.

Hay música en el aire desde el sublime instante
cuando llegaste al mundo, sonriente y fulgurante,
    y en toda nuestra casa la dicha se adivina.

Fuentecita de amores, perfume de mil rosas,
  la flor más primorosa sobre las primorosas:
amo tus bellos ojos... dulcísima Martina.

El cielo se ilumina
y anuncian los clarines que tu soñar empieza,
pues cumples un añito de mágica belleza.





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Derechos Reservados Copyright © 2017
Rafael Humberto Lizarazo G.

Imagen: Martina y sus padres.
Del álbum familiar.



jueves, 1 de junio de 2017

MI ADORADA ESTRELLA





Un día como hoy, hace ya cuatro años, se fue mi madre para siempre... era un sábado primero de junio del año 2013 (un sábado como todos) pero triste y fatal. Yo, calladamente, guardo su recuerdo en un rinconcito de mi corazón: allí donde nadie lo pueda encontrar, allí donde se guardan los tesoros más preciados; tesoros que se llevan en el alma y que nunca se dejan de cuidar. El mundo sigue su marcha y, aunque me atormenta la pena de soportar su ausencia, me reconforta el saber que fui un buen hijo, que hice lo mejor por ella y le di todo el amor que pude darle en la vida... Dios lo sabe.


ELEGÍA
(Soneto)

¡Oh mi niñez, mi juventud… y ella,
recuerdo que jamás podré olvidar!
Busco en el cielo mi adorada estrella
 y encuentro en mil luceros su mirar.

Es cual la musa inmaculada y bella
que inspira mis anhelos de cantar.
¡Oh mi niñez, mi juventud… y ella,
música en el silencio del hogar!

Junio, sin ella, viste de amargura
al recordar aquella desventura,
  junio fatal que un día me arrancó...

el motivo mayor de mi alegría.
¡Madre del alma, compañera mía,
regalo que la vida me brindó!

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Derechos Reservados Copyright © 2017
Rafael Humberto Lizarazo G.

Imagen: Mirando estrellas
De la Internet.


Información del Autor

Mi foto
Simplemente, un bohemio soñador. Hacedor de versos, creador de canciones e inventor de historias. Paz de Río (Boyacá) Colombia, 23 de abril de 1952.

Los que vuelan conmigo

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