Por allá en el año de 1979, estando yo recién enganchado en la empresa Acerías Paz del Río, hubo un enorme deslizamiento de tierras en la vereda de Carichana. Dicho desastre alteró el curso del río Chicamocha y, éste a su vez, destruyó el Ferrocarril Belencito - Paz de Río en longitud de un kilómetro. Consecuentemente, fui delegado por mis jefes como Ingeniero de Campo para dirigir las obras de estabilización del derrumbe y recuperación de la vía férrea. Una año tardamos en volver a normalizar el paso del tren, trabajamos duro, pero pasamos buenos momentos y cumplimos el deber.
VIVENCIAS
(Cuartetas)
A la orilla de la vía
A la orilla de la vía
del tren, yendo a Villafranca,
una tiendecita había
con dos mesas y una banca.
Hasta la tienda llegaba
un joven de cuando en vez,
y de abrazo saludaba
a su amiga Doña Inés.
Doña Inés muy diligente
le brindaba un guarapito,
y él de manera prudente
le pedía otro poquito.
Después camino cogía
hacia el lugar del trabajo,
y por la tarde volvía
al venir de para abajo.
No más al verlo llegar
la señora se apuraba,
y al tiempo de saludar
oto guarapo le daba.
Con Zoraida, con Marina,
con Nubia, Aminta, Mariela
y alguna que otra vecina:
se armaba la francachela.
Y el jolgorio se prendía
de golpe y de carambola,
cuando Doña Inés ponía
algún disco en la vitrola.
Aquel joven parrandero
hoy es el hombre que cuenta,
sus penurias de ingeniero
y tiene más de sesenta.
No más al verlo llegar
la señora se apuraba,
y al tiempo de saludar
oto guarapo le daba.
Con Zoraida, con Marina,
con Nubia, Aminta, Mariela
y alguna que otra vecina:
se armaba la francachela.
Y el jolgorio se prendía
de golpe y de carambola,
cuando Doña Inés ponía
algún disco en la vitrola.
Aquel joven parrandero
hoy es el hombre que cuenta,
sus penurias de ingeniero
y tiene más de sesenta.
Cual fueran rieles tendidos
y, a los polines clavados:
quedaron los tiempos idos
en mi corazón tatuados.
en mi corazón tatuados.
Doña Inés se nos murió,
pero el tren sigue pasando,
y el viejo que ahora soy yo
aún sigue recordando.
Rahulig/016
DRDA
Imagen: El tren de Acerías.
Aminta Diaz M.
pero el tren sigue pasando,
y el viejo que ahora soy yo
aún sigue recordando.
Rahulig/016
DRDA
Imagen: El tren de Acerías.
Aminta Diaz M.
Pude leer tus versos siguiéndolos en cada palabra como si fuera un film.
ResponderEliminarLes has dado vida a unos personajes entrañables.
¡Me encantó ! Una delicia.
Un abrazo.
Hola amigo, si hemos pasado unas fiestas y los reyes muy tranquilos, espero que tu también, un abrazo amigo
ResponderEliminarQuerido viejo ingeniero, en tus versos hay mucha juventud !!!
ResponderEliminarY los recuerdos y buenos tiempos pasados, ayudan a vivir en el presente y nos quitan años......
ResponderEliminarAlegría y mucha ilusión al vivir!!
Un abrazo.
La foto, mi mente unos años retrocedió. ¡Ah tiempos¡ Gracias por mantenerlos tan vivos en su memoria como si fueran el hoy y perpetuarlos en las nuestras.
ResponderEliminarGracias por el comentario, supongo que usted es alguien que también vivió aquellos tiempos inolvidables.
EliminarUn abrazo.
Mi querido Rafael, me encanta ayudar a los poetas que hacen nuevas estructuras métricas.me ha costado trs años apremder la poesía clásica.
ResponderEliminarAdmiro tu trabajo ese momento delicado del del ferrocarril, cuando somos jóvenes casi nada nos asusta.
Buen poema amigo.
Reza por mi, mi salud anda descarrillada por más que intento ponerle freno.
Un gran abrazo
Sor. Cecilia
UNA EVOCACIÓN NOSTÁLGICA.
ResponderEliminarABRAZOS
Qué maravillosa forma la tuya de expresar la nostalgia...
ResponderEliminarUn abrazo.
Que lindo amigo,esos recuerdos,abrazo.
ResponderEliminarBuenos recuerdos te han quedado de aquellos tiempos, se ve que les tienes cariño.
ResponderEliminarSi Doña Ines pudiera leer esta entrada seguro que lloraría de emoción por el cariño que demuestras hacía a ella.
Un abrazo, feliz semana.
¡Qué bendición, estimado Rafael!
ResponderEliminarCuando mi Dios repartió la inspiración, te ha dado la mejor parte. Bien por ti y por quienes tenemos el gusto de leerte.
Deseo que en el 2016 tu creatividad siga viento en popa, que la belleza, la alegría, la amistad, el cariño, la salud y la tranquilidad te acompañen
Un enorme abrazo lleno de luz y de esperanza
He disfrutado tu entrada contando una experiencia... un recuerdo.
ResponderEliminarNo menos como nos lo has regalado en forma de poema.
Un abrazo, Rafael
Que bonito recuerdas, es un cuento en verso que nos hace participar de los sucesos. Un abrazo
ResponderEliminarMal que por bien no venga, allí estuviste tu como buen ingeniero para de nuevo poner la vía férrea en funcionamiento.
ResponderEliminarBonitos recuerdos.
Un abrazo.
Recordar en verso hace que la mente se traslade en estado nostálgico y con ternura hasta un ayer lleno de color. Es un recuerdo y un detalle precioso para esa vivencia y esa Doña Inés.
ResponderEliminarMil besitos, Rafael.
Con que sencillez, precisión, y nostalgia lo relatas, en el y en tu hermoso poema, se nota un goce especial, unos recuerdos que te hacen sentir profundamente aquellos pasados momentos para ti inolvidables y con esos personajes entrañables
ResponderEliminar¡Bellísima entrada!
Besos Rafael.
Muy emotivo, Rafael.
ResponderEliminarTe deseo un Feliz Año Nuevo!
Dar vida a unos recuerdos, como tú lo haces, es ya algo maravilloso.
ResponderEliminarUn abrazo.
Caro Rafael,
ResponderEliminarGostei de seu poema “Vivencias”, e também da sua introdução, com a narrativa sobre os incidentes de 1979.
Um bom ano de 2016 ao amigo e aos seus familiares.
Grande abraço.
Muy bonito esos recuerdos y divertida manera de explicarlos. Me ha encantado leerlos. Un abrazo.
ResponderEliminarMaravillosa manera de expresar tus recuerdos.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Los buenos momentos son los que con más agrado se recuerdan y no hay manera más bonita de recordar que plasmar el recuerdo en un bello poema, te felicito.Saludos cordiales
ResponderEliminarSe que cuando los recuerdos son agradables la poesía se escapa sola y tu la bordas como un cuentecito lejano pero que se hace vivo por momentos.
ResponderEliminarAbrazos amigo Rafael.
Como siempre, eres capaz de meter todo en octosílabos y de forma magistral.
ResponderEliminarUn abrazo.
A través de tus letras una puede viajar por tus lares y respirar lo que tu viviste.
ResponderEliminarBesos
Fizeste-me lembrar Machu Pichu, situada numa região sofrendo ainda hoje de fortes deslizamentos de terras e que se mantém firme, sendo dito sem rir que foi edificada sem ferramentas e por um povo primitivo
ResponderEliminarBoa semana
Excelente mi estimado ingeniero!!
ResponderEliminarAlabanza y Bendición.
ResponderEliminarGracias.
Un Abrazo.
Rafael, sos inmensamente rico en recuerdos y afectos pasados que hoy te acompañan e inspiran para escribirlos y traerlos para nosotros tus seguidores, un abrazo!
ResponderEliminarFabulosa entrada, y supongo, bueno no supongo, ya lo has dicho tú, fue duro el trabajo, pero mereció la pena. Esos recuerdos siempre quedan y la nostalgia es también buena compañera de viajes.
ResponderEliminarAbrazo tocayo.
Excelente composición con recuerdos no olvidados.
ResponderEliminarBuenas noches
Hola Rafael, aquí estoy de nuevo para corresponder tu grata visita y contestar tu comentario.
ResponderEliminarDices en él, con mucha razón, que la publicidad es engañosas y que es capaz de dejarnos sin nada por comprar cosas que no neesitamos, estoy totalmente de acuerdo contigo.
Un abrazo.
Interesante experiencia con teodolito en mano y regla de cálculo, convertida hoy en un bello poema.
ResponderEliminarAbrazos grandes, mi muy querido Rafael.
Preciosos recuerdos bellamente contados Rafael.Sólo discrepo en una cosa,los sesentones aún no somo viejos,estamos en lo mejor de la vida...:)
ResponderEliminarUn abrazo
tu no eres viejo, trovador ni lo serás cuando llegues a los cien. Tienes el alma joven en propiedad definitiva.
ResponderEliminarCariños
Gracias, Socorro, mejor dicho soy un hombre entrado en años con el alma y el corazón de un niño... lo viejo es el acta de nacimiento.
EliminarUn abrazo.
Entrañablemente precioso, querido amigo poeta Rafael. Los poetas nunca seremos viejos, por fuera quizás, pero, el alma sigue siendo niña por los siglos de los siglos. Amén!
ResponderEliminarMe encantó. Felicidades y besos.
Contar y cantar en verso no es fácil, y tú qué bien lo haces Rafael! Te admiro mucho y te felicito. Mi cariño y feliz año para ti y los tuyos.
ResponderEliminarFabulosa entrada Rafael, llena de nostalgias y recuerdos pasados pero que habitan como vivencias en el fondo del alma.
ResponderEliminarCon tus versos nos hacces conocer tu tierra y esos lugares que para ti son todos sentimientos.
Un abrazo con cariño.
Ángeles
Preciosa poesía para recordar una vivencia Rafael, me encanta leerte. Las personas no somos viejas, como decía mi suegra ¡¡vieja, es la ropa!!. Me imagino que un guarapito es alguna bebida.
ResponderEliminarUn abrazo amigo.
He releído el poema.
ResponderEliminarUn canto a los recuerdos sencillos y auténticos que muchos llevamos dentro y que nos hacen sonreír cuando vemos tanta tontería vacía.
De lo local a lo universal, Rafael.
Que bonito poema me encanta como construyes tan hermosos poemas de cualquier situación cada poema tuyo encierra toda una historia de vida.
ResponderEliminarUn gran abrazo amigo gracias por tu agradable visita, estoy empezando de nuevo actualizar mis blogs y he vuelto a responder los comentarios de cada visitante, feliz fin de semana.
Qué bella vivencia derivada de su labor de ingeniero.CReo que son esos eventos, como el suyo en este espacio grato de una guarapería,los que le dan sustancia a la vida. DE no haber sido así, sus hijos,sus nietos y nosotros sus lectores, nos hubieramos perdido de tan agradables anécdotas, hiladas en finos versos. MI abrzo y aprecio. Carlos
ResponderEliminarYa quisiera poder (o haber podido) hacer poesía de mis logros y angustias laborales. ¡Genial!
ResponderEliminar¡jajajaja vaya recuerdos de esas francachelas y jolgorios
ResponderEliminardespués del trabajo!
¿viejo? ¡No! viejos son los trapos, diría mi abuelito.
Besos