"En chaques" de manzanilla, cual decía mi santa madre, hace algunos días pasé por el puesto de la señora Clementina, la que vende plantas medicinales en la esquina de Santa Bárbara. Como hacía tanto tiempo que no nos veíamos debido a la pandemia, le hice la conversa y le pregunté como le había ido con eso de la cuarentena. −Yo no le paro tantas bolas al asunto −me respondió−, prefiero confiar en nuestro Señor y dejar de lado tantas preocupaciones, así vivo mucho más tranquila, entretenida y feliz vendiendo mis manojitos de hierbas... a propósito −añadió−, le tengo la famosa 'moringa' para que espante ese tal virus que anda suelto por ahí, solamente son mil pesitos por al remedio que le puede evitar la enfermedad.
CERTEZAS
(Ovillejos)
I
¿Si me ahoga triste llanto?
¡Canto!
¿Si se oprime el pecho mío?
¡Río!
¿Si quiero hallar un tesoro?
¡Me enamoro!
Nunca lo perdido añoro
ni juventud ni caudales,
y para evitar los males:
¡Canto, río y me enamoro!
II
¿Para la dura inclemencia?
¡Paciencia!
¿Para las penas del día?
¡Alegría!
¿Para soñar que sí puedo?
¡Credo!
Para superar el miedo
y andar en contra del viento
sin morir en el intento:
¡Paciencia, alegría y credo!
__________________
Derechos Reservados Copyright © 2021
Rafael Humberto Lizarazo G.
Imagen: Hierbas en manojos
(De la Internet)
Un bonito juego de cuestiones y respuestas, Rafael, con la musicalidad acostumbrada.
ResponderEliminarUn abrazo.
Bien puede salir un buen bambuco, vals o pasillo lento. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarPonerle rimas a las preguntas, y colocar unas hierbas cerquita seguro que mejora el dia. Abrazos
ResponderEliminarSabios versos motivados por la sabia y valiente filosofía de vida de Clementina. Es don del poeta captar lo que le dictan sus tradiciones y medioambiente, Rafael.
ResponderEliminarAbrazo grande, Poeta.
Es un bonito "ramo de versos"...
ResponderEliminarUn abrazo.
Bonito poema, Rafael, y te diré que la actitud de la señora que vende hierbas es muy sabia...ella no permite que la domine el miedo, y hace muy bien, ya que eso produce un gran stress que baja las defensas del organismo...Es necesario cuidarse y seguir el protocolo, pero sin esa psicosis que algunos tienen por culpa del virus. Un gusto ha sido pasar por tu blog. Un abrazo.
ResponderEliminarPrecioso ramillete de sabias palabras amigo Poeta. Esas que, al igual que las buenas hierbas alegran y reconfortan.
ResponderEliminarUn abrazo Rafael.
Bravo por doña Clementina y su fe y optimismo a toda prueba! Ahora, los mil pesitos son como los nuestros? porque eso sería mucho para un manojito! Preciosos ovillejos, un abrazo Rafael!
ResponderEliminarCristina, mil pesitos por aquí son más o menos en moneda colombiana 25 centavos de dólar americano.
EliminarUn abrazo.
Ah! Eso es otra cosa, gracias Rafael!
EliminarDe los mejores poemas que he leído en mi vida, clásicos inmortales incluidos, ¡Estpes una maravilla!
ResponderEliminar---
En otro orden mi hermano. Estoy orando para que en Colombia no se instale la franquisia del comunismo cubano, que ya acabó con Venezuela y que tiene en la mira a su hermana república... ¡Dios les de sabiduría a la hora de votar!
Bellísimos ovillejos poeta.Saludos
ResponderEliminarGran sabiduría!!.
ResponderEliminarUn hermoso verso.
Un abrazo.
Un placer leerte Rafael.
ResponderEliminarSaluditos.
Entrañables versos que emergen de esa cultura popular tan valiosa y necesaria para reivindicarnos como un mismo pueblo...Unos versos realmente preciosos..
ResponderEliminarMe mato de amor la señora jajajja
Abrazo grande Rafael y la mejor de las semanas, confiando en los consejos de Doña Clementina!!!