Las protestas, las marchas, los desmanes y los enfrentamientos entre dos polos opuestos que agobian a Colombia por estos días son un clara señal de que la paz esta lejana, de que la injusticia social causa el resquebrajamiento de la institucionalidad y genera desconcierto general. Los anhelos de paz de los colombianos son objeto de extrañeza para los observadores externos, quienes se preguntan cómo un pueblo ha podido sobrevivir con tanta zozobra y es lastimoso admitir que no hemos podido, desde todos los extremos, sacudirnos de nuestros esquemas para suscribir un acuerdo social que esté por encima de los intereses mezquinos y personales de aquellos empeñados en ostentar el poder, a cualquier costo, sin pensar por un momento en que nuestro país saldrá del ostracismo cuando todas las corrientes propendan por el progreso y el bienestar del pueblo... la unión construye, la mezquindad destruye.
DOLOR DE PATRIA
(Octavillas - Canción)
A mí me duele la patria
cansada ya de sufrir,
me duele ver a los niños
creciendo sin porvenir.
Me duelen los estudiantes
y también los policías,
me duelen los campesinos
que luchan todos los días.
Me duelen los sin trabajo,
los maestros, los obreros,
los médicos, los artistas
y también los ingenieros.
Me duelen los que reciben
como respuesta una coz,
los que mueren de repente
cuando levantan la voz.
A mí me duele la patria
los maestros, los obreros,
los médicos, los artistas
y también los ingenieros.
Me duelen los que reciben
como respuesta una coz,
los que mueren de repente
cuando levantan la voz.
A mí me duele la patria
masacrada y destruida,
me duele ver a los viejos
con la esperanza perdida.
Me duelen todas las madres
que añoran una caricia,
de los hijos que murieron
entre el odio y la sevicia.
Me duelen los poderosos
esclavos de su grandeza,
y mucho más los de abajo
sumidos en la pobreza.
Me duele de sur a norte
mi atormentada nación,
mi patria que ha padecido
por los siglos la opresión.
Me duele mucho, me duele,
lo siento en el corazón.
Me duele mucho, me duele,
mi atormentada nación.
Me duelen los poderosos
esclavos de su grandeza,
y mucho más los de abajo
sumidos en la pobreza.
Me duele de sur a norte
mi atormentada nación,
mi patria que ha padecido
por los siglos la opresión.
Me duele mucho, me duele,
lo siento en el corazón.
Me duele mucho, me duele,
mi atormentada nación.
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Derechos Reservados Copyright © 2019
Rafael Humberto Lizarazo G.
Imagen: Colombia herida
(Udenarperiodico.com)
Mucho dolor, tienes razón, mi querido Rafael.
ResponderEliminarAbrazos grandes!!!!!!!!!
Tremendo el grito Rafael, de ese tu dolor que es el dolor de todo ser humano que se precie y que busca siempre la justicia, la solidaridad y equilibrado desarrollo de los pueblos, sin sátrapas que lo desmantelen...
ResponderEliminarUn abrazo
Rafael, qué tristeza de país, donde cada día se aumenta la brecha social, y se acrece la pobreza y la miseria. Qué buena conjunción de versos y música, eb este dolor de poema. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarMucho dolor, demasiado dolor, para un país que podría atender bien a todos sus habitantes.
ResponderEliminarUn abrazo.
De una tristísima situación te ha salido un bello poema.En España también lo estamos pasando mal por políticos corruptos y por los independentistas que quieren separarse de España a la fuerza saltándose todas las leyes y no nos dejan vivir en paz...muy triste situación también que yo no había vivido nunca.Deseo que se solucione lo de tu patria y podáis vivir en paz y armonía.Saludos
ResponderEliminarVersos con mucha musicalidad y que reflejan muy bien la realidad que te rodea.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un poema que llega hondo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Todos en general cuando llegan al poder "DICEN" que lo que más desean es el bienestar del pueblo ¡Cuanta falsedad!. Deseo lo mejor para tu país y todos los que sufren por conflictos parecidos. Tu poema es desgarrador pero muy bello.
ResponderEliminarUn abrazo Rafael.
Cuando la patria duele muy hondo en el alma duele y allí sólo llega la poesía como la tuya para sanarla y dejar constancia...
ResponderEliminarMe has conmovido, Rafael, una vez más.
Tu sentimiento es compartido ampliamente, Rafael, hay un destino común a muchos países que no logran unir a su mismo pueblo, como le decía hace poco a una amiga del blog, deberían aparecer naves extraterrestres para que volquemos la atención ahí y nos unamos los pueblos, un abrazo!
ResponderEliminarAparte del problema colombiano de las guerrillas, veo Rafael que ustedes y nosotros en Chile padecemos de dramas similares, en el caso nuestro con violencia desatada y destructiva bajo cuyo marco es muy difícil construir acuerdos, certezas y paz.
ResponderEliminarComparto ese dolor por mi querido país. Argentina está sufriendo....
ResponderEliminarSaludos
En resumen, nos duelen las injusticias de este mundo. Un saludo cariñoso para Colombia.
ResponderEliminarMucha tristeza amigo,cariños.
ResponderEliminarUna oleada comenzó por acá al sur donde yo vivo, que no lo podíamos creer y si era necesario ese decir ya basta de este sistema económico opresión de diferentes maneras...y claro salir y pedir no hay engaño cuando la justicia según se entienda es necesario rectificar y en mucho...y dentro de ello surge lo mejor y peor del ser humano...aquí hay ciudades que están como si la hubiese tirado un tornado o una bomba, muchos recogen a sus mártires de ambos lados, otros mutilados de porvida...y los políticos de siempre peleándose entre ellos haber que dar al pueblo que patalea sin cesar , pero ellos sin perder sus privilegios...no hay según mi ver ningún sector político que te de seguridad en la vida de una nación,desde tiempos inmemoriales hemos sido vandalizados...y la corrupción de todo tipo hace el resto, que han vendido hasta lo inimaginable y después rasgan vestiduras...
ResponderEliminarHay un gran dolor en el mundo, porque nos olvidamos de Dios, pues cada quien ahora debe buscar ese refugio, siento que peores tiempos se nos avecinan...al menos segamos hasta que la voz se enmudezca y se termine la Internet a llamar al ser humano a verse realmente y volver sus ojos a lo divino, que lo terrenal ya nos pasó la cuenta ...desatar las amarras quizás ahí si logremos la verdadera libertad.
solidarizo contigo, porque somos del mismo dolor.
Todas las madrugadas oro por Colombia...para que no se convierta en otra Venezuela o Cuba. Lo mismo hago por Chile
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