Era Don Jesús Molina el zapatero del pueblo, cada mañana salía a caminar por los alrededores y subía hasta una colina cercana para (según él decía) estirar las piernas y desentumir el cuerpo antes de empezar las labores. Pero un día, no regresó. Los amigos salieron a buscarlo y lo encontraron muerto cerca de la cima, recostado en una piedra, a la vera del camino. Aún se escucha en las esquinas la historia de Jesús, el zapatero del pueblo.
Por el camino empedrado
que lleva hasta la colina,
subía Jesús Molina
a paso lento, cansado.
Sentose sobre una piedra
a contemplar el paisaje,
pensando que ya su viaje
terminaba, en esta tierra.
Pasó de pronto un viajero,
hola señor, ¿Cómo está?
¡Cuénteme que tal le va!,
sin afanes, yo lo espero.
Charlaron largo y tendido
sobre la vida y la muerte,
de la desdicha y la suerte
Jesús y el desconocido
De la charla en un instante
a Molina antes de irse,
al punto de despedirse
le pregunta el caminante:
¿Gustaría buen amigo
a mi casa acompañarme?
Allí podré yo enseñarle
la paz que mora conmigo.
Encontraron a Jesús
(cual si estuviera dormido)
JESÚS MOLINA
(Redondillas)
Por el camino empedrado
que lleva hasta la colina,
subía Jesús Molina
a paso lento, cansado.
Sentose sobre una piedra
a contemplar el paisaje,
pensando que ya su viaje
terminaba, en esta tierra.
Pasó de pronto un viajero,
hola señor, ¿Cómo está?
¡Cuénteme que tal le va!,
sin afanes, yo lo espero.
Charlaron largo y tendido
sobre la vida y la muerte,
de la desdicha y la suerte
Jesús y el desconocido
De la charla en un instante
a Molina antes de irse,
al punto de despedirse
le pregunta el caminante:
¿Gustaría buen amigo
a mi casa acompañarme?
Allí podré yo enseñarle
la paz que mora conmigo.
Encontraron a Jesús
(cual si estuviera dormido)
en la piedra recogido
y en sus manos una cruz.
Cada noche en la colina
se ve desde la explanada,
una cruz iluminada...
¡La cruz de Jesús Molina!
Rahulig/09
DRA
Imagen:
Tomada de la red
y en sus manos una cruz.
Cada noche en la colina
se ve desde la explanada,
una cruz iluminada...
¡La cruz de Jesús Molina!
Rahulig/09
DRA
Imagen:
Tomada de la red
Hola querido amigo!
ResponderEliminarMuy emotivo.
Tal vez seria la mejor manera de morir con una cruz en la mano,pero acompañado por Dios.
Besos y abrazos te mandamos desde Argentina.
que Dios te bendiga
Una historia muy bella, cantada con un acento muy de pueblo, es decir, llano y emotivo. Felicidades por esta aportación. Un abrazo.
ResponderEliminarSin duda Don Jesus Molina,subiendo por esa colina, sabía finalmente que un buen día, lograría llegar hasta la cumbre y abrazar a Dios con su cruz y desde ahí mirar la llanura y sin premura quedarse por siempre, en ese cielo.
ResponderEliminarHe imaginado ese recorrido por la elocuencia de tus versos.
Gracias por compartir y gracias también por pasar por mis esquinas dejándome tus huellas.
Abrazos peruanísimos
Que hermoso!!!!
ResponderEliminarde verdad fue así???
Un besito.
Una forma muy tranquila de alcanzar el ultimo sueño, ya me gustaria a mi emprender asi mi ultimo viaje.
ResponderEliminarTremenda historia, muy bien relatada y llena de emociones.
Un fuerte saludo.
Una historia preciosa Rafael.
ResponderEliminarPor cierto, no habrás olvidado tus canciones verdad??
Besines
HOLA Rafael,muy hermosa la historia ojala todos encontráramos la muerte asi como dulce, sin dolores ni lamentos. ¡Muy bueno! como todo lo que esribes. un beso
ResponderEliminarlindos versos que describen la historia de jesus molina,tal ves ese caminante ya conocia sus andares y lo acompañaba a diario sabiendo ya de sus males, para llevarlo a la senda donde hoy descansa tranquilo, un hermoso escrito amigo al recuerdo de alguien conocido y estimado en el pueblo, un abrazo y bendiciones con amor..luz estrella
ResponderEliminarExcelente poema amigo. Se nota la raíz que asoma de la tierra.
ResponderEliminarEs un placer visitar tu espacio.
Gracias por compartir.
Cálido abrazo.
Rafael...
ResponderEliminarAlgo hermoso lo que nos traes. No se si sera cierta la Historia o es puro folclore, pero da igual, como nos lo has hecho llegar, transporta sentimento, ritmo y pasión en lo que escribes. Transmites, y eso es lo mejor que le puede ocurrir a un escritor.
Un fuerte abrazo
Una entrañable historia nos cuenta hoy, querido amigo,gracias por compartirla
ResponderEliminarBesos
La gente buena, siempre muere en paz, porque así vivió.
ResponderEliminarCuando llega el tiempo de irse, es mejor hacerlo en buena compañía.
ResponderEliminarUn abrazo, Rafael.
increíblemente místico y mágico poema
ResponderEliminarrealmente parece un paisaje bíblico
me ha encantado.
Un abrazo
Una historia bien contada con la muerte en el fondo de las preocupaciones de todo ser humano. Saludos.
ResponderEliminarMuy dulce, entrañable y bello. Como todos tus poemas. En ellos se refleja tu bondad. Un abrazo
ResponderEliminarMUY LINDO!
ResponderEliminarCariños para ti.
mar
Triste final, pero una bonita historia, gracias por compartirla
ResponderEliminarun placer pasar por tu casa.
Que tengas una feliz semana
un abrazo
RMC
Qué bonito romance!!!
ResponderEliminarUn abrazo.
Como siempre nos asombras con tus versos, muy bellos!
ResponderEliminarUn abrazo
Hola, Amigos:
ResponderEliminarLa muerte de Don Jesús sucedió en la colina, escribí los versos para poder contar la historia a mi manera, poniéndole algo de imaginación.
Gracias por los Comentarios,
Abrazos.
Bonito álbum familiar. Se adivinan hermosos paisajes a vuestro alrededor.
ResponderEliminarBien logrados estos versos y con un buen cierre. Genial!!!
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Una historia muy real, interesante, algo parecido ocurrió por mi tierra, cerca de un monasterio, en la sierra. Desde entonces el peregrinaje está a la orden del día. Siempre nos traes estas historias tan humanas y cercanas de la gente.
ResponderEliminarUn abrazo Rafa para ti y los tuyos, que tengas una excelente semana.
Una historia muy natural... en el fondo todos llevamos a cuestas la cruz del tormento.
ResponderEliminarSaludos.
Rafael, bello y hermosa muerte, te imaginas poder morir en esa paz? gracias.
ResponderEliminarMe dejas pensando en todo lo que es la muerte y la forma de morir.
ResponderEliminarSaluditos.
Rafael, no debes perderte el montaje de fotos y música que he hecho en mi entrada de ayer. Saludos.
ResponderEliminarPreciosos versos y, preciosa historia, Rafael. Ojala, siempre fuera así la llegada de la muerte que, de una forma u otra, vendrá para todos.
ResponderEliminarSaludos. María
wao eso me acordo a la cruz que hay aqui en una colina...
ResponderEliminarsaludos amigo..
Hermoso poema. Don Jesús Molina no se detuvo a descansar en la colina, se detuvo a conversar con su guía, se dispuso al mejor viaje de su vida.
ResponderEliminarCálidas letras y buen blog, lo voy sugiendo.
Saludos!
Una historia preciosa, la que nos has dejado hoy.
ResponderEliminarGracias por tu enorme sensibilidad.
Besos.
Hermoso poema, bella la historia de Jesus Molina, Linda cancion la que nos compartes. Te dejo un beso, cuidate.
ResponderEliminarhola rafael paso a dejarte mi cariño y desearte un lindo miercoles, un abrazo y bendiciones con amor...luz estrella
ResponderEliminarBellos son tus versos, todos los escribes son muy bellos, gracias por compartirlos.
ResponderEliminarNo te tenía enlazado en mi blog de poemas, y acabo de dejarte enlazado.
Un beso.
Que inspiracion tan grande, mi querido Rafael.
ResponderEliminarLoor a la memoria de Don Jesus Molina.
Abrazos..
Maravilloso, sorprendente.
ResponderEliminar¿Es una leyenda de tu pueblo?
¿Llevaba el zapatero la cruz al salir o no?
Impresiona.
Un beso
Hola, amigos:
ResponderEliminarPor el camino hacia la cima de la colina, don Jesús, recortaba varitas de los arbustos para ir haciendo una crucecita que dejaba clavada debajo de un viejo árbol de pino. El día de su muerte no completó el recorrido y tal vez por eso, tenía aún la cruz en la mano.
Abrazos.
HOLAAAAAAA RAFAEL!!!!pasando a saludarte y deleitarme con tus poemas que encierran ese sentimiento tan genuino.....inconfundible, " tu estilo" que destella sencillez y sabiduría por todos lados!!!! hermosísimo!!!!!! miles de abrazos y felicitaciones.....( ya anduve mirando todo lo atrasado!!!! espectacular!!!!! ....como siempre
ResponderEliminarBonita historia pero triste...
ResponderEliminarHola, Rafael, cuanto me ha gustado tu visita.
ResponderEliminar¡Que bonito relato!, me ha llegado al corazón, morir con un cruz en las manos,es como llevar el alma al cielo directamente, como se iría la de Jesús.
¿Sabes?, en Marbella hay una cruz, en su montaña, Sierra Blanca, que dicen que la pusieron unos marineros, porque desde allí les llegó una luz que les indicó el camino para llegar a tierra, y creo que es cierto, todos los 2 de mayo sube la gente del pueblo hasta allí, para venerar esa cruz, y hacerle peticiones.
Como te he dicho, porque he perdido el hilo, me ha encantado tu comentario, veo que has llegado al fondo de lo que quiero transmitir con él, que es el amor que todos deberíamos tener, porque las caricias alimentan el amor, y sin amor, no hay felicidad.
Un fuerte abrazo, tu amiga de la bonita ciudad de Marbella.
Gracias. Es bellisimo.
ResponderEliminarBesos y amor
je
Estimado Rafael que hermoso homenaje le has brindado a ese ser que con suavidad decidió dormirse en tranquilidad!!!!!!
ResponderEliminarRealmene emocionan tus versos!!!!!
Cariños
Excelente historia rimada, me ha gustado todo el contenido. Te sigo leyendo. Saludos!
ResponderEliminarMe ha encantado la historia tan tradicional, sencilla y clara... Todo es tan musical y emocional... ¡Un gustazoo!
ResponderEliminarMIS PENSAMIENTOS. MERCE CARDONA.
ResponderEliminarDice, que bella canción y muy emotiva, estoy seguro de que Jesus Molina, esta disfrutando de una gran paz.
Gracias por pasar por mi casa.
Beosssssssssssssssssss
vaya pobre Jesus...pero murio como a el le gustaba en la montaña...muy bonita poesia de la vida y muerte de un gran hombre
ResponderEliminarb
buen fin d semana
besos
Mrina
hola rafael paso adesearte un limdo fin de semana, abrazos y bendiciones cn amor....luz estrella
ResponderEliminarEs una historia fascinante, de esas que terminan hechas leyendas o mitos, y que son tristes, muy tristes.
ResponderEliminarUn beso, Rafael.
Rafael...
ResponderEliminarLa cruz de la colina me parece preciosa. Muy emotivo y sentimos que esta bendecida por Dios.
La historia es increible.
Te felicito
Rafael, me encanta lo que has relatado esas historias son las que dan emotividad a lo que nos rodea... y si es de nuestros pueblos ya ni te cuento. Preciosa la dedicatoria que le has hecho. Te felicito.Que tengas un estupendo fin de semana y para tí un abrazo y otro para tu madre. Desde mi silencio
ResponderEliminarMe ha gustado mucho esta historía con un ritmo fluido que invita aseguir leyendo hasta el final.
ResponderEliminarBesos.
Adelaida
Te deseo al lado de tu familia ...buen fin de semana
ResponderEliminarBESOS
mARINA
Vine a agradecer tu visita, regresaré a leerte. El poema posteado me encantó. Te sigo.
ResponderEliminarHasta pronto.
Precioso...es que la vida y la muerte van unidas de la mano
ResponderEliminarBesos y amor
je
Que bella historia costumbista y hecha con tu talento en poema. En sentido contrario en un distrito de mi provincia cuentan de una vieja quie vendia fruta en una colina, pasó un pobre y le pidio le obsequie alimento, mas la mujer se negó. de pronto aquel hombre se transmuto en Jesus la convirtió en roca asi como sus frutas como castigo.
ResponderEliminarHe pasado por ese cerro hay ahora una virgen y es de forma curiosa piedras enormes como frutos , lo raro es que en sus alrededores no hay un cerro de aquella rara morfología.