Porque soy un simple mortal de paso por este mundo, quizás tenga más defectos que virtudes. He sido feliz y también he soportado tiempos nublados. Un año atrás, estábamos pasando por momentos difíciles; pero el Señor nos regaló un ángel para alegrarnos la vida, se llama Juliana, es nuestra primera nieta.... Ya somos abuelos, la tormenta se calmó y la dicha regresó.
EPÍLOGO
(Soneto)
Y... la tranquilidad tornó a mi vida
cuando pensaba, que ya no volvería;
en los ojos de una niña consentida,
portadora de amor y de alegría.
Es mi anhelo, conservo la esperanza,
de lograr con cariño y con paciencia
si Dios quiere, si la vida me alcanza,
dejar limpia y tranquila mi conciencia.
Y... si, con mis acciones he ofendido
a varios o tan sólo a un ser querido:
con humildad les pido me perdonen,
que comprendan el ruego que hoy les dejo,
que se acuerden de mi cuando sea viejo
y por piedad, que nunca me abandonen.
Rahulig/010
DRA
Imagen: Juliana y el resto
Del álbum familiar